viernes, 20 de junio de 2008

Menotti: "La dictadura me usó"

César Luis Menotti habló sobre su situación en los años de plomo en el diario Corriere della Sera "Fui usado, claro. Lo del poder que se aprovecha del deporte es viejo como la humanidad".
El entrenador puso como ejemplos que los señores feudales utilizaban a los caballeros en los torneos, o que el presidente de la República italiana, Sandro Pertini, viajó en el avión de la selección de Italia después de la victoria en el Mundial de 1982. "¿Lo habría hecho si el equipo hubiese perdido", se preguntó.
"No las volvería a hacer. Aunque es fácil hablar ahora", añadió Menotti, en referencia a las fotografías junto al dictador argentino Videla durante las celebraciones tras conseguir el Mundial.
El técnico argentino explicó que mientras se disputaba el Mundial, "nadie podía imaginarse que en esas horas se tiraban a los cadáveres al océano".
"Si se hubiera sabido, trabajadores, campesinos, intelectuales, futbolistas habríamos salido a la calle a pedir que terminase todo esto, pero la lucha política es algo más grande del público", añadió.
Menotti rechazó cualquier tipo de crítica sobre su decisión de entrenar a aquella selección, ya que en un "Mundial no sólo participan once jugadores y un entrenador, sino también millones de personas".
Sobre la política actual, el "flaco" Menotti afirmó que aunque su ídolo sigue siendo Ernesto "Che" Guevara, pero ya no cree en las "revoluciones populistas" y prefiere la política de presidentes como la de Chile, Michelle Bachelet; de Brasil, Luiz Inácio da Silva o de Argentina, Cristina Fernández.

7 comentarios:

El Doc 9 dijo...

Me cuesta creer que él no lo sabia. Sea como sea,ese Mundial, lamentablemente es un mal recuerdo para nosotros, una verguenza, como esa que pasa a veces en la familia, cuando el tìo se pujso borrhacho y se hizo encima, algo asi, que no es gracioso, es penoso, fue eso es para la Argentina, su Mundial de hace 20a años atràs: un mal recuerdo. Menos mal que Maradona y su gente nos dieron en 1986 un campeonato posta

Anónimo dijo...

Son todos iguales... Entrenador y jugadorees, nadie tira ni una puntita, sino mira la nota chota que me salió a mi despues de haber estado en una conferencia con tres mundialistas del 78´...
saludos che

Anónimo dijo...

es michelle "B"achellet in M, muy bueno igual, pueden entrar a www.loquealfutbollegusta.blogsapot.com y opinar.

mario dijo...

El opio de los pueblos

Con el tiempo, luego del regreso de la democracia a la República Argentina, surgieron cuestionamientos de índole político a los méritos que tuvo aquel plantel que se coronó campeón del mundo.

Muchos se empeñan en ensuciar aquella epopeya hablando de los excesos cometidos por el Gobierno que lideró Jorge Rafael Videla. Hasta se llegó a decir que Videla "visitó" al equipo peruano en el entretiempo de aquel partido clave en que la Argentina logró el pasaporte a la final.
Es indudable y lamentable que la política se inmiscuye en el deporte por el gran efecto que éste tiene en las masas populares. Es un fenómeno que sucede en muchos países, en especial en los que no están desarrollados en materia socioeconómica.

El fútbol es indudablemente el deporte más popular de todo el mundo, lo cual es hábilmente capitalizado por la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (F.I.F.A.). para que sus máximos dirigentes hagan oscuros negocios a expensas de la pasión popular. Parafraseando a Karl Marx quien decía que "la religión es el opio de los pueblos", desde la segunda mitad del Siglo XX hasta estos días, "el fútbol es el nuevo opio de los pueblos". Eso queda claramente constatado especialmente cuando, cada cuatro años, se disputa la Copa del Mundo que organiza la F.I.F.A. multitudes quedan paralizadas atrás de sus equipos nacionales y se exacerban nacionalismos.

La Argentina no es la excepción. El fútbol ha sido usado en muchas oportunidades por los poderes de turno para tapar la realidad. Sucedió con el Mundial del 78, como también con el del '82 disputado en España con la Guerra de Malvinas en el medio, el que ganamos en México '86 cuando sufríamos la inestabilidad de la democracia incipiente y en el épico Italia '90 cuando la economía impuesta por Carlos Menem estaba dejando mucho desempleo y recesión. En Estados Unidos '94, la recuperación de Diego Maradona fue una "cuestión de Estado" que involucró hasta al mismo Presidente de la Nación, como así también su posterior suspensión por doping positivo. Más acá en el tiempo, recuerdo la previa a Corea - Japón 2002, cuando la Selección que dirigía Marcelo Bielsa llegaba como gran favorita y con una enorme presión de tener que "dar una alegría a la gente" que padeció los tristes sucesos que terminaron con el (des)Gobierno de De La Rúa, que estaban aún muy frescos.

Creo que no hay que menospreciar el logro de los dirigidos por Menotti, sentó un gran precedente en la historia del deporte argentino ganando merecidamente la Copa del Mundo. Creo que es justo homenajear a nuestros deportistas que protagonizaron aquella hazaña y no tratarlos de cómplices de un régimen.

Insisto en lo que dije en otro post en donde hablé de las Juntas Militares que gobernaron la Argentina entre 1976 y 1983: no hay que culpar exclusivamente a esos militares que ejercieron "terrorismo de Estado". Hay que recalcar que hubo toda una sociedad que apoyó la toma del poder por parte de quienes integraban las Fuerzas Armadas, ya que la Argentina estaba sumida en todo un caos social fruto del desastroso gobierno de María Estela Martínez y el accionar de grupos guerrilleros que aterrorizaban a nuestra sociedad de entonces y que hoy son tratados como héroes nacionales.

Roberto Parrottino dijo...

Cuesta, cuesta mucho creer las declaraciones del entrenador, ya que él tuvo contacto directo con muchos jerarcas de la dictadura. Además, al Flaco no se lo ve a un tipo fácil de titiretear, como, por ejemplo, el Tolo Gallego, que hoy cuando se le pregunta de ese Mundial y el genocidio que se llevaba a cabo, se calienta mucho.

Saludos.

Roberto Parrottino dijo...

Mario: no es tan lineal la historia ni la política. Una cuenta no siempre cierra y las etapas se estudian desde ciertos parámetros.

El fútbol no es el opio de los pueblos, por favor. Lo que pasa es que vos estás llamando fútbol a lo que ves en la televisión, a las pavadas que se suelen erguir y a las demostraciones paupérrimas de toda calaña.

El fútbol puede ser un vehículo de ideas, alegría, creación, color, corazón y pases cortos. Sólito se ensució ese Mundial organizado por los militares genocidas. Y lo que hubo fue un terrorismo de Estado en Argentina. Una sociedad a la que se destruyó y que hoy muestra, por ejemplo, la cultura del miedo y viejos resabios de aquellos años, por favor.

mario dijo...

Roberto:

A mí me encanta el fútbol, tanto jugarlo como también verlo por televisión.

Pero cuando hablo del nuevo opio de los pueblos, me refiero a como usan a este hermoso deporte los poderosos de turno para capitalizar euforias masivas.

Es impresionante como durante un Mundial de Fútbol no se habla más que de lo que pasa en un campo de juego y en las calles de cualquier ciudad de Argentina se vé más celeste y blanco que en cualquier fecha patria. No puedo entender como Diego Maradona es ponderado por encima de personajes como Favaloro, Belgrano o San Martín, quienes hicieron mucho más por este país que el "10".

No solo Videla cayó en esa tentación. ¿No te acordás de Alfonsín sacándose la foto con Maradona y los demás campeones del '86 en la Casa Rosada?, ¿No te acordás cuando Menem llevó a los subcampeones del '90 a la Rosada? ¿Y nadie critica a Diegote por ser menemista?

¿Vos creés que si hubiera habido otro campeonato mundial logrado el Presidente que estuviere no caería en la tentación de mostrarse con los ganadores?

Considero que "los pueblos tienen los gobiernos que se merecen". Y nuestro país reafirma este dicho con numerosísimos ejemplos a lo largo de la historia.

Te mando un abrazo.